Hoy el presidente Luis Abinader asume un segundo periodo de su gobierno y tiene a su cargo responder a grandes expectativas que tienen los sectores económico, social, sindical y político. Ellos esperan que finalmente se resuelvan problemas pendientes que no fueron atendidos en el primer mandato.
En el ámbito laboral, el Gobierno tiene pendiente materializar una reforma laboral que ya tiene 11 años discutiéndose, incluyendo los cuatro de Abinader.
El sindicalista Rafael (Pepe) Abreu espera que al menos se logre la “reforma posible”.
Otra reforma pendiente que Abinader hereda a su segundo mandato es la de la Ley de Seguridad Social, que provoca quejas por el gasto de bolsillo en los servicios médicos y por las bajas pensiones. Justo en 2028 se ha programado que comiencen a otorgarse las pensiones por vejez del sistema creado en 2001.
Otra reforma pendiente que Abinader hereda a su segundo mandato es la de la Ley de Seguridad Social, que provoca quejas por el gasto de bolsillo en los servicios médicos y por las bajas pensiones.
En el ámbito económico se recoge una mezcla de optimismo y preocupación por el devenir de las finanzas públicas, la producción nacional y el poder adquisitivo de la gente.
El vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), César Dargam, mira positivamente el panorama macroeconómico, basado en los resultados de los últimos años.
El coordinador de Participación Ciudadana, Erick Hernández Machado, cree que la nueva gestión tiene el desafío de reducirce el gasto y del tamaño del Estado para lograr los objetivos de la reforma fiscal. Además, la lucha contra la corrupción.