Por Luis Hernández
SAN FRANCISCO DE MACORÍS. – En una jornada cargada de simbolismo y compromiso social, la presidenta nacional de la Fundación Derechos Humanos Global, Rebeca Henríquez, encabezó una emotiva actividad en el Parque Duarte, junto a un grupo de niños promotores de derechos humanos, reafirmando el papel de la infancia en la construcción de una sociedad más justa y solidaria.
Durante la actividad, se entregaron libros ilustrados que recogen la breve historia de los derechos humanos y los 30 derechos fundamentales reconocidos por la ONU, distribuidos entre ciudadanos y familias presentes en el parque.
La iniciativa no solo tuvo un carácter educativo, sino también lúdico. Los niños participantes realizaron un dibujo colectivo en el suelo del parque: una paloma de la paz hecha con tiza, simbolizando la importancia del juego, la paz y el derecho a una infancia libre y plena.
“LOS NIÑOS TIENEN DERECHO A JUGAR Y A VIVIR EN PAZ”
Henríquez destacó que esta actividad busca empoderar a las nuevas generaciones, fomentando desde edades tempranas una conciencia sobre sus derechos y responsabilidades. “Es urgente educar a nuestros niños en el respeto, la dignidad y la paz. Este tipo de encuentros los forma como ciudadanos conscientes, críticos y solidarios”, señaló.
La Fundación agradeció el respaldo de las organizaciones internacionales Jóvenes por los Derechos Humanos y Unidos por los Derechos Humanos, que han facilitado materiales educativos gratuitos para su difusión en la República Dominicana.
UNA CULTURA DE RESPETO DESDE LA INFANCIA
Esta jornada forma parte de un programa nacional de sensibilización y educación en derechos humanos que la Fundación Derechos Humanos Global impulsa en distintos puntos del país.
Con actividades como esta, la organización busca sembrar valores de respeto, responsabilidad y equidad en las comunidades, colocando a los niños como agentes activos en la promoción de una cultura de derechos humanos.
“No es solo entregar un libro, es abrir una puerta al conocimiento, a la empatía y a la acción social desde la niñez”, concluyó Rebeca Henríquez.
