El Comité Nacional de Defensa del Pequeño y Mediano Productor de Pollos solicitó al presidente Luis Abinader tomar medidas urgentes para regular la sobreproducción de pollos, situación que, según los productores, ha desencadenado una crisis económica que favorece a las grandes empresas avícolas y amenaza con desplazar a los pequeños productores.
Durante una rueda de prensa realizada en la sede de la Asociación de Pequeños Productores Avícolas Moca-Licey (Approamoli) en el municipio de Licey al Medio, los representantes del sector denunciaron que desde 2021 existe un plan supuestamente orquestado para centralizar la producción avícola en manos de unos pocos empresarios de gran escala, afectando gravemente a los pequeños productores.
Ambiorix Cabrera, presidente de Approamoli, expresó que esta es la crisis más severa que han enfrentado en tres décadas. Según Cabrera, los pequeños productores se encuentran luchando contra “dos poderes”: el económico, debido a la competencia desleal de las grandes empresas, y el gubernamental, por la falta de medidas para regular la situación. “Falta sensibilidad humana para que los pequeños productores puedan superar este colapso provocado por prácticas desleales de los grandes productores”, afirmó.
La productora Miguelina Alba agregó que el gobierno debe transparentar y regular la producción nacional para evitar que las grandes empresas continúen acabando con los pequeños productores. “Esta falta de regulación está llevando a la quiebra a los pequeños productores, lo que afecta también al Gobierno”, señaló Alba, quien insistió en la necesidad de que se tomen medidas en defensa de los más vulnerables.
Por su parte, Alfranny Ferreira denunció que varias instituciones, como el Ministerio de Agricultura, la Dirección General de Ganadería (Digega) y el Consejo Nacional de Producción Pecuaria (Conaprope), están apoyando a las grandes empresas a través de la aprobación de solicitudes de no objeción para la importación de reproductores, lo que agrava aún más la crisis del sector.
Los productores explicaron que, mientras en 2021 había 45,600 progenitores abuelos, la cifra aumentó a 78,200 en 2022, lo que representa un incremento del 60 %. Este aumento desmedido, según los pequeños productores, forma parte de una estrategia para desplazar a los productores locales y centralizar la producción en manos de los grandes empresarios.
Ante esta situación, los pequeños productores hicieron un llamado urgente al Gobierno para que regule la producción avícola y proteja los intereses de los productores más vulnerables, quienes se ven afectados por la sobreproducción y las prácticas desleales de las grandes empresas del sector.