Santo Domingo, República Dominicana. — La Procuraduría General de la República ha ordenado formalmente una investigación penal para esclarecer las causas del colapso estructural en la discoteca Jet Set, tragedia que ha cobrado la vida de al menos 226 personas y ha dejado una profunda marca en la conciencia colectiva nacional.
La Dirección General de Persecución, en coordinación con la Fiscalía del Distrito Nacional, está a cargo del proceso investigativo, según confirmaron fuentes del Ministerio Público. El objetivo: determinar responsabilidades civiles y penales en una catástrofe que pudo haberse evitado.
El anuncio del inicio de la investigación llega mientras aún continúa el luto nacional y persisten los reclamos ciudadanos por justicia. Entre las voces más visibles figura Zulinka Pérez, hija del icónico merenguero Rubby Pérez, también fallecido en el siniestro, quien confirmó que su familia —junto a otros afectados— emprenderá acciones legales contra los propietarios del establecimiento nocturno.
“Esto no puede quedar impune. Perdimos a un padre, un ícono, y cientos de familias quedaron devastadas. Los responsables deben responder ante la ley”, expresó Pérez.
La discoteca Jet Set, considerada un símbolo del entretenimiento nocturno dominicano por más de cuatro décadas, colapsó durante un evento que convocó a cientos de personas, en su mayoría figuras del arte, medios y ciudadanía general.
El presidente Luis Abinader decretó seis días de duelo nacional, que culminaron este domingo, mientras continúan celebrándose misas y actos religiosos en memoria de las víctimas. La tragedia ha tenido repercusión incluso en la diáspora dominicana, que ha expresado solidaridad a través de vigilias, cartas y mensajes de apoyo desde diversos puntos del extranjero.
Además del proceso penal, se han iniciado gestiones para una demanda colectiva, coordinada por el bufete Law Firm, que representará a varios familiares de las víctimas.
La Procuraduría aún no ha ofrecido detalles sobre las diligencias iniciales, ni ha citado a los dueños o administradores del local. Sin embargo, se espera que en los próximos días se intensifiquen las acciones legales y se rindan los primeros informes técnicos.
La sociedad dominicana, aún en shock, observa con atención y exige que este caso no quede en la impunidad.