Por: Leidy Esmeralda
Washington, EE.UU.- La administración del presidente Donald Trump ha adoptado una postura más agresiva en materia migratoria, al considerar a todos los migrantes indocumentados como “criminales”, lo que allana el camino hacia su prometido plan de deportaciones masivas de más de 11 millones de personas que residen en el país sin estatus legal.
Durante una rueda de prensa esta semana, la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, defendió la postura del Gobierno, asegurando que las más de 3,500 personas arrestadas recientemente por el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) tienen un “récord criminal” por el solo hecho de estar en el país de manera irregular.
“Es un gran cambio cultural en nuestro país ver a alguien que rompe con las leyes migratorias como criminal, pero eso es exactamente lo que son”, afirmó Leavitt.
¿Es ilegal vivir en EE.UU. sin estatus legal?
A pesar de la declaración de la Casa Blanca, bajo la ley estadounidense, vivir en el país sin autorización no es un delito penal, sino una falta civil. Por lo tanto, la afirmación de que todos los migrantes indocumentados tienen un “récord criminal” es incorrecta.
No obstante, cruzar la frontera sin inspección o intentar reingresar tras una deportación sí están tipificados como delitos:
• El ingreso indebido es un delito menor.
• Reingresar tras ser deportado es un delito grave.
En la última década, EE.UU. ha judicializado con mayor agresividad estos casos, lo que ha llevado a consecuencias como la separación de familias y mayores obstáculos para solicitantes de asilo, según un informe de American Immigration Council.
Trump acelera plan de deportaciones
Desde su llegada al poder, Trump ha firmado varias órdenes ejecutivas relacionadas con la inmigración. Una de ellas instruye al Departamento de Justicia a “priorizar” la judicialización de personas por entrada indebida y presencia sin autorización continuada.
Durante su campaña, el mandatario prometió realizar la mayor deportación masiva en la historia de EE.UU., asegurando que la prioridad serían migrantes con antecedentes penales. Sin embargo, su gobierno ha comenzado a divulgar diariamente el número de detenciones de ICE, destacando en redes sociales los perfiles de algunos de los arrestados.
Críticas y controversia
Activistas y defensores de los derechos humanos han criticado la postura del Gobierno, advirtiendo que la criminalización de la inmigración podría fomentar la discriminación y generar un clima de hostilidad contra las comunidades migrantes.
Mientras tanto, el debate sobre la política migratoria de Trump sigue generando división política en Estados Unidos, con republicanos apoyando la medida y demócratas denunciando un uso “desproporcionado” de los recursos para perseguir a inmigrantes.