POR BILEIDY MEDINA
Solucionar este problema requiere una visión a largo plazo, compromiso político y la participación activa de todos los sectores de la sociedad.
SANTO DOMINGO.-La República Dominicana atraviesa una grave crisis energética marcada por frecuentes apagones que impactan a los dominicanos y sectores esenciales de la economía.
La República Dominicana atraviesa una crisis energética grave, con apagones frecuentes que afectan a miles de personas y sectores económicos cruciales.
Estos cortes no solo alteran la vida cotidiana, sino que también causan pérdidas económicas significativas, comprometen la seguridad pública y evidencian deficiencias en el sistema eléctrico nacional.
La falta de un suministro eléctrico constante afecta la calidad de vida en los dominicanos, interrumpiendo la educación, el entretenimiento, y generando incertidumbre y frustración. La población responsabiliza al gobierno, empresas eléctricas y a los ciudadanos que se roban la energía.
La poca iluminación en calles y hogares aumenta la vulnerabilidad a la delincuencia, y los hospitales y centros de emergencia sufren por la falta de electricidad, poniendo en riesgo la vida de los pacientes.
Algunos sectores han implementado recargas eléctricas para garantizar energía las 24 horas. Este método permite a los usuarios pagar por adelantado la electricidad que van a consumir, acreditando el monto al medidor.
Una vez agotado el crédito, deben realizar una nueva recarga para mantener el suministro.
Los apagones en la República Dominicana son un reflejo de los desafíos profundos en la infraestructura y gestión del sistema eléctrico.
Solucionar este problema requiere una visión a largo plazo, compromiso político y la participación activa de todos los sectores de la sociedad.