La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, anunció la presentación de cargos contra tres personas acusadas de incendiar vehículos y propiedades de Tesla, incluidos concesionarios y estaciones de carga en distintas localidades del país. Bondi exigió penas de entre cinco y veinte años de prisión para cada uno de los acusados, asegurando que estos actos son considerados como terrorismo doméstico.
Incidentes relacionados con Tesla y Elon Musk
Pam Bondi señaló que estos ataques forman parte de una ola de violencia motivada por el descontento hacia Elon Musk, CEO de Tesla, y el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). La fiscal advirtió que aquellos que participen en estos actos enfrentarán serias consecuencias legales: “Los días de cometer delitos sin consecuencias han terminado”.
Entre los ataques registrados, se incluyen:
- Salem, Oregón: Un individuo fue arrestado por lanzar ocho cócteles molotov contra un concesionario de Tesla.
- Loveland, Colorado: Otro sospechoso fue detenido tras intentar incendiar vehículos Tesla y portar materiales para fabricar armas incendiarias.
- Charleston, Carolina del Sur: Un tercer acusado fue arrestado por prender fuego a estaciones de carga y escribir mensajes profanos contra el presidente de EE. UU.
Además, el FBI investiga otros ataques registrados esta semana en concesionarios de Tesla en Las Vegas, Nevada, y Kansas City, Misuri, bajo la sospecha de que podrían ser actos de terrorismo.
Vandalismo contra Tesla se extiende a Canadá
En Canadá, al menos 80 vehículos de Tesla fueron vandalizados en un concesionario en Hamilton, Ontario, con daños que incluyen rayones en la carrocería y ruedas pinchadas. Este acto se atribuye a protestas relacionadas con el respaldo de Elon Musk al presidente Donald Trump y los aranceles impuestos por la administración estadounidense al acero y aluminio canadienses.
Otras acciones de vandalismo se han reportado en el país desde el inicio de la guerra comercial entre EE. UU. y Canadá, especialmente tras declaraciones públicas de Musk apoyando a Trump. La situación llevó al Salón del Automóvil de Vancouver a excluir vehículos Tesla del evento por motivos de seguridad.