San Salvador, 31 de marzo de 2025 – El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció la llegada de 17 presuntos delincuentes de alto perfil deportados desde Estados Unidos, asegurando que todos son “asesinos” y miembros de organizaciones criminales como el Tren de Aragua (TdA) y MS-13.
En un mensaje publicado en su cuenta de X, Bukele detalló que el traslado se realizó en una operación militar conjunta con Estados Unidos, como parte de la lucha contra el crimen organizado y el terrorismo.
Decisión de EE.UU. y Posibles Conflictos Legales
El Gobierno estadounidense, liderado por Donald Trump, ha endurecido su política de deportaciones. El secretario de Estado, Marco Rubio, confirmó que esta medida se enmarca en la aplicación de la controvertida Ley de Enemigos Extranjeros, una norma de 1798 que permite la expulsión de extranjeros sin juicio previo.
El 15 de marzo, esta misma ley fue utilizada para deportar a más de 200 venezolanos, trasladados al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) en El Salvador. Sin embargo, un juez federal de EE.UU. bloqueó la aplicación de esta norma, aunque la expulsión ya se había ejecutado.
Críticas y Falta de Transparencia
Hasta el momento, el Gobierno de Bukele no ha ofrecido información sobre el estatus legal ni las condiciones de los deportados recluidos en la cárcel de máxima seguridad. Expertos y organismos de derechos humanos han expresado preocupación por la falta de garantías judiciales en estas detenciones masivas.
Mientras tanto, la administración Trump sigue defendiendo la aplicación de medidas radicales contra la inmigración irregular, argumentando que el Tren de Aragua y la MS-13 representan una amenaza a la seguridad nacional.
La polémica crece, y el impacto de esta política podría derivar en nuevas tensiones diplomáticas entre Washington y otros países de la región.
