Por Luis Hernández
SANTO DOMINGO. – El mismo día del colapso parcial del techo en la discoteca Jet Set, tragedia que dejó al menos 236 muertos y más de 180 heridos, Antonio Espaillat fue advertido del peligro estructural, pero no suspendió la actividad nocturna, según revela el expediente del Ministerio Público.
Uno de los mensajes clave incluidos como prueba en la solicitud de medida de coerción fue enviado por Gregorio Adames Arias, empleado del establecimiento, a las 2:33 p.m. del 7 de abril, apenas horas antes del colapso. En el texto, dirigido directamente a Espaillat, se advertía:
“Don, hay un tema importante que hay que revisar en la discoteca. Los plafones que se están rompiendo es que le está cayendo pedazos del techo y es peligroso eso (…) Es bueno desde que haya chance revisar el techo completo.”
RESPUESTA SIN ACCIÓN
A las 2:44 p.m., otro empleado, Manuel Jiménez Mateo, envió un segundo mensaje a Espaillat confirmando que se habían cambiado algunos plafones, pero que continuaban cayendo piedras del techo. Además, informó que una empresa había sido contactada para realizar un levantamiento estructural en los días siguientes.
La respuesta de Espaillat fue breve y superficial:
“De acuerdo con ambas cosas.”
A pesar de esa doble advertencia, la discoteca mantuvo en pie el evento programado con la agrupación de Rubby Pérez, ignorando el potencial riesgo para empleados, clientes y músicos.
NEGLIGENCIA DOCUMENTADA
El Ministerio Público resalta que estas comunicaciones prueban una negligencia consciente, que agrava la responsabilidad penal del imputado. Señala que Espaillat tenía conocimiento inmediato y directo del riesgo inminente y no tomó ninguna medida correctiva o preventiva, como suspender la actividad o evacuar el local.
El expediente sostiene que esa omisión, unida al historial de deterioro conocido por el empresario, configura los tipos penales de homicidio involuntario, negligencia grave e intimidación de testigos, por los que se ha solicitado prisión preventiva contra Antonio Espaillat y arresto domiciliario para su hermana Maribel, también señalada por no detener la agenda de eventos pese a advertencias previas.
ESCALADA DE PRUEBAS EN CONTRA
Este nuevo hallazgo se suma a la entrevista televisiva con Edith Febles, donde el propio Espaillat admitió que el techo tenía filtraciones y que no se realizaron estudios estructurales al adquirir el local. El Ministerio Público ya ha inmovilizado bienes como medida cautelar para garantizar compensaciones a las víctimas, mientras más de 80 querellas civiles han sido presentadas por familiares de los fallecidos y heridos.
El caso Jet Set no solo ha estremecido al país por la magnitud de la tragedia, sino que podría marcar un antes y un después en la aplicación de justicia frente a desastres evitables en República Dominicana.