Por: Bileidy Medina
En el año 2024, la gestión del presidente Luis Abinader en relación con la migración haitiana ha sido objeto de intensos debates y críticas. El gobierno dominicano implementó medidas estrictas para controlar la inmigración, anunciando en octubre planes para deportar hasta 10,000 haitianos indocumentados por semana, argumentando un “exceso” de inmigrantes en el país.
Estas acciones resultaron en la deportación de aproximadamente 230,765 haitianos entre enero y mediados de noviembre de 2024
El endurecimiento de las políticas migratorias ha generado tensiones diplomáticas con Haití y ha puesto en entredicho la reputación internacional de la República Dominicana. A pesar de las críticas, el presidente Abinader ha defendido estas medidas como necesarias para la seguridad y estabilidad del país, enfatizando la responsabilidad de la comunidad internacional en la crisis haitiana.
La población sin embargo considera las medidas como flojas y afirman se deben reforzar y que las leyes de inmigración de los dominicanos se deben de respetar de igual manera que se hace en otros países.