El dirigente opositor venezolano Edmundo González Urrutia reafirmó este martes su compromiso de asumir el cargo de presidente electo de Venezuela, pese a las amenazas y obstáculos impuestos por el gobierno de Nicolás Maduro. Durante un acto en Madrid, con la participación telemática de María Corina Machado, González Urrutia instó a mantener la presión internacional para lograr una transición democrática en el país sudamericano.
González Urrutia, exiliado en España tras denunciar fraude en las elecciones presidenciales, presentó actas que respaldan su victoria, desafiando la proclamación de Maduro como presidente por parte de la autoridad electoral venezolana. “Con miedo no se va a la guerra”, afirmó, al ser consultado sobre su eventual regreso a Venezuela para asumir el cargo.
El opositor enfatizó la necesidad de un cambio ordenado y concertado, aunque señaló que es fundamental continuar ejerciendo presión diplomática y democrática para concretar la salida del régimen actual. Por su parte, María Corina Machado calificó al gobierno de Maduro como un “régimen en fase terminal”, marcado por fracturas internas y medidas desesperadas.
En el Día Internacional de los Derechos Humanos, González Urrutia denunció la comisión de crímenes de lesa humanidad en Venezuela y destacó las investigaciones en curso de la Corte Penal Internacional. Según datos de organizaciones humanitarias, más de 17,000 personas han sido detenidas por razones políticas en la última década, con condiciones de reclusión extremadamente graves que incluyen torturas y tratos denigrantes.
Los opositores también señalaron como prioritaria la defensa de los derechos humanos en una eventual transición democrática, al tiempo que condenaron el asedio a la embajada argentina en Caracas, donde se han refugiado colaboradores de Machado. “Quienes han cometido delitos de lesa humanidad tendrán que asumir las consecuencias”, sentenció la dirigente opositora.