El informe se desprende de las conclusiones y recomendaciones del primer Congreso de Economía y Energía 2024, desarrollado durante tres días por la FCES, la FIA y el Instituto de Energía de la UASD.
La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) considera pertinente y oportuno orientar el aparato productivo hacia patrones de consumo sostenible, para lo que se requiere un plan de desarrollo económico que contribuya a mejorar la calidad del empleo y la producción de bienes exportables.
De igual modo, la academia estatal considera necesario garantizar el acceso universal a la energía, en un contexto en que todos los ciudadanos tengan acceso a servicios energéticos asequibles, fiables y modernos.
Estos planteamientos forman parte de las conclusiones y recomendaciones que se desprendieron de la celebración del primer Congreso de Economía y Energía 2024; que fue organizado por las facultades de Ingeniería y Arquitectura (FIA), y la de Ciencias Económicas y Sociales (FCES); en conjunto con el Instituto de Energía.
Mediante una rueda de prensa realizada en el Lobby del paraninfo de la FCES, los organizadores del evento expresaron la urgencia de impulsar el aumento en la capacidad de generación basada en biomasa y residuos sólidos, contemplando el uso del hidrógeno verde para finales de la próxima década.
La rueda de prensa fue encabezada por el decano de la FIA, Omar Segura, la vicedecana de FCES, Maribel Lorenzo, y por los directores de la escuela de Economía y del Instituto de Energía, Nicolás Jiménez y José Luis Moreno San Juan, respectivamente.
El evento tuvo una duración de tres días, y contó con la participación de expositores nacionales e internacionales.
Otras conclusiones y recomendaciones
También destacaron que hay que fomentar las interconexiones eléctricas con otros países de la región y en lo inmediato completar los estudios de factibilidad, y promover el uso de combustibles alternativos.
Otras de las recomendaciones gira en torno a la promoción de la competencia en lo que tiene que ver con la generación eléctrica, para lo que se necesita implementar políticas públicas que incentive el interés de nuevas empresas generadoras de electricidad en ese mercado, y que se realicen subastas competitivas, para así evitar privilegios y licitaciones con “actores predilectos”.
Propusieron además la definición de una estrategia para contar con la posibilidad de usar energía electronuclear a partir del año 2040, y fortalecer al regulador eléctrico, para evitar conflictos de interés.
Sugieren que sea actualizado el rol de la Refinería Dominicana de Petróleo, para mejorar la estructura de precios de importación y transporte de combustibles.
Otras de las conclusiones fue sugerir al Estado impulsar el aumento de la capacidad solar fotovoltaica, mediante una estrategia que establezca el aumento gradual durante los próximos 25 años.
Definieron como urgente la redacción de la Ley Nuclear para regular el uso de ese tipo de energía para fines pacíficos en la República Dominicana.
Abogaron para que se desarrollen infraestructuras sostenibles y realizar grandes inversiones, incluyendo redes inteligentes, transporte público eficiente y edificaciones ecoeficientes, para reducir emisiones de carbono y crear empleo en sectores verdes.
Durante los tres días de celebración del congreso Economía y Energía expusieron el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Pavel Issa, el ex ministro de Energía y Minas, Antonio Almonte, el economista Apolinar Veloz, Balkydia Campusano, Clara Herasme, Dustral Vicioso, Fernando Peña, Gabriel Alonzo José Luis Moreno y entre otros.